Por: Amir Nassar Tayupe.
Desde los inicios de la práctica del fútbol como deporte establecido a nivel mundial, muchos han sido los jugadores que han destacado como estrellas, pero entre tantas estrellas hay una que brilla por encima del resto.
Desde los inicios de la práctica del fútbol como deporte establecido a nivel mundial, muchos han sido los jugadores que han destacado como estrellas, pero entre tantas estrellas hay una que brilla por encima del resto.
Edson
Arantes Do Nacimiento, PÉLE, es considerado como el mejor jugador de todos los
tiempos. Su nombre e imagen se convirtieron en un icono para el
deporte.
Tan solo decir que fue un grande, es quedarse corto. Péle,
nació en el año 1940 en Minas Gerais, Brasil.
Desde pequeño jugó al fútbol en las calle de Sao Paulo donde vivía con su
familia.
Sus padres lo apodaron “Dico” pero sus compañeros de fútbol
callejero lo llamaron “Péle”. Heredó el talento de su padre quién fuese jugador
profesional, pero que no quería que su hijo practicara esta disciplina deportiva.
A pesar de que su padre se oponía, el talento, voluntad y
genio de Péle lo llevaron a fichar con el Santos Futebol Clube a sus 15 años manteniéndose
en las categorías inferiores y con 16 años debutó en el primer equipo.
Péle, fue quién perfeccionó la figura de “mediocampista
armador”, siendo el cerebro del equipo, ese jugador que movía los hilos y desde muy joven su depurada técnica, visión de juego e instinto
goleador lo hacieron brillar con el Santos FC.
Triunfos para toda una nación
Sus virtudes y protagonismo lo hacen llegar a la Selección de
Brasil, que contaba con nombres como Zagallo, Didi, Vava y Nilton Santos, con
quienes conquistaría el Mundial de Suecia en 1958, primero para su país.
Este logro, iniciaría una senda de títulos para la selección
canarinha, en 1962 Brasil repitió el titulo mundial pero Péle solo pudo jugar
dos partidos porque sufrió un desgarro.
Luego, sus aspiraciones con la selección no se cumplieron
hasta el Mundial de México 70’, donde en suelo azteca “O Rey” desplegó toda su
clase para alzar por tercera vez la Copa Jules Rimet.
El rey del balón
Con el Santos FC era imbatible, conquistó seis títulos del
campeonato Brasileño de Fútbol, la copa Libertadores, la Intercontinental y la
Supercopa de Campeones Intercontinentales, entre otros títulos de menos
renombre.
Su juego dentro de las canchas lo hizo convertirse en ídolo
de masas, admirado por todos como toda una estrella.
En 1974 deja el Santos y
firma con el Cosmos de Nueva York en Estados Unidos donde lograría un campeonato y jugaría hasta el 1977
cuando finalmente se retiraría con 37 años.
Batió todas las redes
Con la Selección Brasileña batió las redes en 95
oportunidades, en el Santos FC marcó 1.087 goles, en USA anotó en 64 ocasiones
y en partidos de exhibición gritaría 36 veces, para ser el máximo anotador de
la historia.
“Voy a decirles algo
aparentemente blasfemo, pero con una lógica ¿Saben que en cualquier encuesta
soy más conocido que Jesucristo?” Péle.
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